LOS RESIDUOS TÓXICOS
Se denominan residuos tóxicos y peligrosos a aquellos que contienen una serie de sustancias, y en unas cantidades tales que suponen un riesgo tanto para la salud humana como para el medio ambiente.
Los efectos de los residuos tóxicos dependen de la cantidad, del ritmo de liberación y del tiempo de permanencia en el medio ambiente. Entre los más frecuentes podemos citar: metales pesados, como el arsénico, el cadmio, el plomo y derivados, los biocidas y los compuestos farmacéuticos. También se consideran peligrosos los productos inflamables y los explosivos, y aquellos que pueden generar sustancias tóxicas aunque ellos mismos no lo sean.
Clasificación de los residuos:
- Residuos sólidos urbanos
- Residuos industriales.
- Residuos mineros
- Residuos radioactivos
- Residuos nucleares
- Residuos forestales
- Residuos agropecuarios
- Residuos sanitarios o clínicos.
En este enlace se desarrolla una información mucho más detallada acerca de los distintos tipos de residuos existentes y sus diferentes características.
Las consecuencias de la exposición a una radiactividad elevada son fatales para el ser humano. Está probado que puede causar la muerte, y en dosis más bajas, provoca cánceres, enfermedades y trastornos genéticos que afectan muy seriamente a la descendencia del afectado.
En los sesenta años de existencia de la energía nuclear y pese a las enormes inversiones, nadie ha conseguido dar una solución satisfactoria al problema de los residuos radiactivos de alta actividad.
De todos los problemas asociados al uso de la energía nuclear, que aconsejan su inmediato abandono, éste puede ser el determinante.
Los peligrosos residuos son el talón de Aquiles de las centrales nucleares.
Estos letales residuos se están acumulando en las centrales nucleares de todo el mundo. En España también.
La industria nuclear no sabe qué hacer con ellos. Desesperada por el enorme volumen de los residuos radiactivos y el elevado coste de su gestión,ha tratado y trata de resolver su problema de diversas formas procurando "sobre todo" solucionarlo
de la manera más barata para ellos.
En España, actualmente, en el cementerio de El Cabril, situado en la Sierra de Hornachuelos (Córdoba), es el cementerio nuclear de residuos de baja y media actividad, a pesar de que en un principio se dijo que allí no se almacenarían residuos procedentes de centrales nucleares, sino sólo de instalaciones radiactivas. En el año 1992 se amplió su capacidad de 15.000 a 300.000 bidones. El Cabril no es, ni mucho menos, un sitio apropiado para instalar un cementerio de residuos nucleares por varias razones:
* Se encuentra en una zona sismicamente activa, con lo que no es un sitio seguro.
* Está en el sur, cuando la mayor parte de las centrales están en el norte, lo cual aumenta los transportes.
* Está en una zona de alto valor natural y, además, en la cabecera de cuenca del Guadalquivir, cuyas aguas se contaminarían en caso de escape.
* Está situado junto a dos embalses que surten de agua a gran parte de los ciudadanos de Córdoba y provincia.
Para los residuos de alta actividad tenemos las piscinas de las propias centrales. Sin embargo, éstas están saturadas y en un plazo de diez años no cabrán más residuos.
Para paliarlo, España envía muchos de sus residuos a Francia, con un coste de 60.000 euros al día. Así pues, la única opción parece ser la construcción del almacén que nadie quiere. La otra alternativa es dejar de emitir residuos nucleares, pero para ello habría que frenar la actividad atómica -algo que el Gobierno no contempla- y desarrollar las energías renovables.
Más allá de los riesgos y preferencias de los vecinos, un ATC (almacén temporal centralizado de residuos) es una gran inversión para un municipio pequeño. Para el Gobierno, construirlo es mucho más barato que hacer un almacén en cada central o transportarlos a otros países. Siempre que hablamos de residuos radiactivos existe un riesgo. Sin embargo, centralizar los residuos es lo más seguro que se puede hacer con ellos. Dispersarlos en distintos puntos es más peligroso que transportarlos a un almacén único.
Anualmente se producen en España unos 1.000 m3 (unas 2.000 toneladas) de residuos, la mayoría de ellos provenientes de las centrales. Se trata de líquidos, herramientas, trapos de limpieza, filtros, jeringuillas, envases, etcétera.
Según los ecologistas,"Estos almacenes son prácticas de hechos consumados". Greenpeace España denuncia que la construcción de almacenes de residuos "simboliza una estrategia de hechos consumados del Gobierno".
En España hay cien balsas con residuos tóxicos
El CSIC alerta de que las balsas están cerca de pueblos
La mayoría de estas balsas se encuentran cerca de poblaciones y no disponen tampoco de planes de emergencia para poder alertar a la población del entorno si se produce un accidente, como el que acaba de ocurrir al oeste de Hungría y que ha provocado la muerte de cuatro personas.Los equipos de rescate de Hungría continúan la búsqueda de los desaparecidos a causa del vertido tóxico
"Es como si una ola de dos metros de altura de barro rojo hubiera arrollado un pueblo", relata el enviado especial de 'El País', Rafa Méndez
Los equipos de rescate húngaros están trabajando en la búsqueda de las personas que permanecen desaparecidas como consecuencia del vertido tóxico que se produjo en el oeste del país, mientras que también se está tratando de contener los efectos nocivos del fango rojo procedente de la balsa de contención de una planta de aluminio.Enlaces de interés:
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